Jacqueline Du Pré es considerada uno de los mayores talentos que ha tenido el violonchelo en el siglo veinte. Un prodigio que ha logrado combinar una técnica precisa, la pureza en los tonos con la alegría y la audacia expresiva de su juventud, logrando un dominio total del instrumento.
Nacida en una familia de clase media el 26 de enero de 1945 en Oxford, Inglaterra, tiene su primer contacto con la música en su casa natal, en Surrey, a través de su madre Iris Greep, una excelente pianista y profesora de música. Estudia junto a su hermana, Hillary, quien luego se perfeccionara en la interpretación con la flauta traversa.
Es en estos momentos donde Jacqueline descubre el sonido y su pasión por el violonchelo y comienza su aprendizaje en este instrumento en Londres en 1951, primero con Alison Dalrymple en la London Violoncello School y luego, desde 1956 hasta el 1961, con el célebre violonchelista británico William Pleeth, al que Jacqueline consideró como su único maestro.
Con apenas 10 años ganó el prestigioso premio Guillermina Suggia siendo la concursante más joven en participar y conseguir dicho premio, consiguiendo así una beca por seis años de estudio. El violinista Yehudi Menuhin que la escuchó tocar en esa época recuerda: “la euforia que me produjo a mí y a todos los oyentes, a los que contagió de su alegría y embriaguez con la música”.
En 1961 recibe de su madrina Ismena Holanda, el Violoncelo Stradivarius de 1673, instrumento con el que debuta oficialmente y que usa hasta el año 1964. Desde de la muerte de la artista, a este violoncelo se lo denomina con el nombre Stradivarius Du Pré.
En la Navidad de 1966, ‘Jackie’ como le decían sus amigos, conoce al pianista y director de orquesta argentino-israelí Daniel Barenboim y se casa con él en Junio de 1966. Meses más tarde viaja a Rusia y recibe clases con Mstislav Rostropovich en Rusia. Durante toda su carrera, Jacqueline Du Pré tocaría junto con grandes orquestas, directores y solistas prestigiosos.
Pero la carrera de Jacqueline solo dudaría hasta los 28 años, una muy severa esclerosis múltiple la arranco de los escenarios y 12 años mas tarde a los 40 años Du Pre muere. Pero su legado y fama perduran hasta hoy consagrándose como una de las mejores exponentes del Violoncello en el siglo XX